17 nov 2009

Reencuentros

Es algo indescriptible lo que puede llegar a provocar el reencuentro con una persona, en especial, cuando es una amigo del que no se tenía noticias de él desde más de 10 años.

Sergio Payán, mi amigazzo de la secundaria!! El encuentro fue más que divertido, porque al llegar a la imprenta a checar unos detalles de mi primer hijo editorial, él estaba sentado al lado de Leticia (la diseñadora, muy linda por cierto) y se me quedó viendo, y no le presté mucho atención hasta que dijo: "Yo a ti te conozco".

Por su puesto que ambos con unos kilos más, pero la memoria es buena y en cuanto lo reconocí, pegué santo grito pues no pude contener la emoción: "Cómo estás lindo? Cuánto tiempo sin saber de ti? Qué haz hecho de tu vida?". El sólo quería dar un apretón de manos, pero este encuentro ameritaba un gran abrazo de oso.

Antes de checar a lo que me tenía en la imprenta, estuvimos hablando y poniéndonos al corriente de nuestras peripecias: él me presumió su hermoso hijo y yo a mi pichirrín, intercambiamos teléfonos, correos y quedamos vernos pronto para poder echar la platica con un cafecín, junto con su esposa y nuestros respectivos hijos para conocerlos.

Antes de irme, hizo un comentario que dejó la lágrima agarrada de la pestaña. "Quiero aprovechar que tengo testigos para agradecerte como se debe, ya que nunca lo había hecho, lo bien que te portaste conmigo durante mi estancia en Guadalajara, tus cartas que me sirvieron de aliento el tiempo que estuve por allá, mil gracias por que tu nunca te olvidaste de mí". De ahí siguieron flores, flores y más flores y yo roja a todo lo que da, siendo en vano mis intentos por interrumpirlo.

No puede quedarme mucho tiempo ya que el Sergio (el chofer del trabajo) estaba esperándome y tuve que retirarme, con la promesa de vernos pronto para echar bien la platicada.

De esto hace casi un mes y aún no nos hemos puesto de acuerdo; sin embargo, quise escribir sobre esto para no olvidarme de lo hermoso que es encontrarte con alguien que hacía tiempo no veías. Sergio, mil gracias por tu amistad, pero sobre todo por tu cariño. Que quede en actas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario