29 dic 2009

Dos años de ser mamá

Hace algunos días cumplí dos hermosos años de ser mamá. Al ver hacia atrás me sorprende encontrarme con sucesos inexplicables y maravillosos a la vez: como una sonrisa de Hans al recogerlo de la guardería, me inyectan nuevas fuerzas para continuar con la jornada del día; sus besos y abrazos y el reciente "te amo" que me dice antes de dormir; escucharlo darle gracias a Dios por el inicio y final del día y su comida, abrazarlo por las mañanas mientras se toma el primer bibi de la mañana, verlo dormido como si fuera un angelito, verlo jugar tierra con tanta emoción igual o más que cuando está pintando...y tantos, tantos momentos tan hermosos y únicos que me ha regalado y me sigue regalando cada día.

Él cumple dos años de vida, y yo de ser su mamá; le festejo sus logros y su empeñó por aprender, mientras yo, festejo el regalo que Dios puso en mis manos y la alegría de cada mañana que me da a través de él.

23 dic 2009

Pista de hielo...en Culiacán!!!


El camión que tomo para ir a casa, luego de recoger a Hans a la guardería, pasa exactamente en frente del Palacio de Gobierno y lo que era la estación de Ferrocarriles de México, lugar donde está el famoso Tacuarinero y que mi pichirrín cada que lo ve grita entusiasmado "pupu pupu mamá, pupu".

En fin, lo que me sorprendió en días pasados fue que precisamente en ese lugar estaba un tráfico extraordinariamente cargado, raro para esas horas del día, y con patrullas a por todo el boulevard que lo primero que pasó por la cabeza es que algo malo había ocurrido (la burra no nació arisca, la hicieron), pero cual va siendo mi sorpresa cuando uno de los chavos de prepa le comenta a su amigo: "orale, hoy es la inauguración de la pista de hielo. Toda esta semana va a ser gratis, hay que ir". Casi se me salieron los ojos cuando escuché eso, pues hace años, cuando regresé del DF me lamenté mucho que el sr. Ebrard se le ocurriera inaugurar la pista del zócalo cuando ya me había regresado. Con este antecedente no puede dejar de decir a mi pichirrín "mi amor, te voy a llevar a la pista para que veas cómo se cae la gente".
Quizás fue un comentario muy cruel de mi parte, pero quien conoce Culiacán, sabe que además de ser una ciudad donde el invierno es un albur, para cuántas personas les gusta que en verdad sepan patinar, y ahora, cuántas de eses creen que hayan patinado en hielo.

Según cifras de un boletín de gobierno del estado, esperan atender 120 mil personas del 15 de diciembre al 15 de enero, así que ¡hay espectáculo para rato! Por mi parte, creo que me reservaré las ganas de patinar hasta el año entrante, ya que mi condición física mejore y esté apta para caer y levantarme con mayor facilidad.

Lo cierto es que es todo un acontecimiento histórico para los culichis.

(foto tomada del portal noroeste.com)
http://www.noroeste.com.mx/publicaciones.php?id=539756

21 dic 2009

Prueba superada

Luego del nervio, las prisas y los días ajetreados entre preparativos, trabajo y clases...el 17 de diciembre a las 5:30 de la tarde terminé de hacer el pastel de mi pequeñito para su merienda de dos años.

Ahora que estoy subiendo las fotos me doy cuenta que hice una versión en montañas nevadas, cuando llevaba un colorante verde que le iba a dar la ilusión de una campiña en primavera; en fin, lo cierto es que estamos en diciembre y aunque no neva en Culiacán (dudo mucho que algún día suceda), me gusta más como se ve nevado. Por cierto la anécdota que hay que recordad es cómo se obtuvo el tren que adorna el pastel, ya que fue toda una exhaustiva búsqueda por Mercado Libre hasta que dar con el complemento adecuado: un silbato de plástico que me serviría además para adornar el pastel. Ahora mi pequeñito anda por la casa jugando con él y está a punto de pasar a sus juguetes favoritos.

Las criticas fueron favorables en cuanto al sabor (algo muy importante) y el diseño, y hasta hubo quien no me creyó que había hecho el pastel de mi pichirrín. Bueno, la muestra está y el original también. Lo mejor de todo es la satisfacción de haberle horneado su pastel y empezar así una tradición en nuestra familia.

16 dic 2009

El previo y una posada


Ayer a dos días del cumpleaños de Hans, me preparé para el reto, e igual que el año pasado, hago un previo para saber cómo me va a quedar y no andar luego a las carreras consiguiendo luego un pastel, pero bueno eso no ha sucedido, hasta ahora.

El previo fue el pastel para la posada de las viejas de la ECS (viejas porque asistiríamos puras mujeres, aclaró muy sabiamente Ana Liz en uno de los correos). A mí me tocó el postre y qué mejor ocasión que esta. El pan, a diferencia del año pasado, lo hice con receta propia, y la decoración, aunque sencilla, creo que se veía linda. Para mi sorpresa en una hora ya tenía el pastel horneado. Por las prisas no pude esperar a que se enfriara mucho el pan (algo que no se debe hacer es decorar cuando el pan aún este caliente) pero pese a ello, quedó bien. El pan era de vainilla, la cubierta de chantilli y decorado de sprinkles en forma de hojas y bolitas rojas.


Entre mis amigas causó sorpresa, pues me dijeron que me había vuelto toda una ama de casa, y no me sabían esa monería, pero lo cierto es que por el comentario me di cuenta que tampoco se habían enterado que había iniciado un negocio de muffins, así que les platiqué las peripecias que hicimos y que, desgraciadamente, se suspendió hasta nuevo aviso. En fin, ya veremos hoy por la noche cómo queda el definitivo.

8 dic 2009

El reto


EL cumpleaños de Hans se acerca y se me ha fijado entre ceja y ceja hacerle su pastel. La verdad es que deseo que esto se haga una tradición en mi familia y que él, cuando sea grande, recuerde con cariño el amor y dedicación con el que su mamá le horneaba y decoraba sus pasteles de cumpleaños.

Este fin de semana, al igual que el año pasado, empezaré el pastel de prueba y, si todo sale como espero, el miércoles estaré horneando y el jueves decorándolo antes la merienda. Debo decir que es algo emocionante, y sube aún más la adrenalina al ver el elemento principal: Thomas el tren; el cual llegó por paquetería el día de ayer.

El sabor del pan será de vainilla (pues Hans todavía no puede comer chocolate) y aunque eso ya esta definido, aún no decido detalles técnicos como si lo haré de fondant o de betún tradicional, falta definir la estructura de los cerros así como la dimensión(diámetro del pan)y hacer unas pequeñas compras. ¡Es todo un proyecto!

El reto ya lo lancé al aire y ahora falta ver cómo quedará. De lo que sí estoy segura es que a mi pichirrín le encantará, ya que además de que el trenecito será su próximo juguete, también es un silbato que sé, no dejará de sonar en cuanto lo tenga en sus manos.

7 dic 2009

Chivas ¿de corazón?


Los camiones folclóricos de Culiacán. No me he encontrado transportes más singulares como los de aquí, ya que pueden estar adornados de peluches, fotos, catedrales de madera (que sirven a la vez de cajas de dinero), estrobos, luces de colores, calcomanías, pinturas y hasta distintivos de los equipos favoritos del deporte que más le guste al chofer en cuestión.

Llamó mi atención uno en particular: Las Chivas. Como tapatía, desde pequeña me enseñaron a decir que le iba a las Chivas con todo el corazón. La verdad, es que el futbol no es una de mis pasiones, pero al ver el escudo del equipo, mis recuerdos afloraron: Cada verano (desde que tengo memoria) esperaba que uno de mis tíos o primos se apiadaran de mi para llevarme a ver el clásico, América contra Chivas, en el estadio Jalisco. ¿Cuándo sucedió esto? NUNCA. Luego de tanto esperar, el "Chivas de corazón" se acabó.

Sin embargo, mi solecito le ha dado por jugar a la pelota y decir GOOOOL! cada vez que le pega. No sé, si él sepa qué significa lo que dice, si en la sangre de los varones fluya una sustancia especial que desde niños ya vengan programados para que les guste algún deporte, el cual por lo general es futbol; lo cierto es, que de ser así, me pregunto ¿él será Chiva de corazón?
Aunque no sé la respuesta, si me recuerda un encuentro que tuvo con un niño de su edad, quien su papá lo traía con el uniforme rayado, y se pusieron a platicar felices y contentos en el malecón. Pero, el tiempo lo dirá.

En una café

Vestido de traje y corbata, mientras degustábamos un delicioso café en la esquina de Michoacán, frente al parque México; así es precisamente como he decidido recordarte. La muerte de un amigo es triste, pero cuando le fue arrebatada la vida de una forma miserable, no sólo es triste si no horrible: por eso prefiero recordarte con tu traje y corbata, tomando un delicioso café americano acompañado de un pastel de zanahoria.

Sé que mi partida del DF fue triste para tí, que no seguimos en contacto tanto como lo hubiésemos querido, pero ahora que un amigo tuyo contestó mi mensaje no sólo me dejó asombrada, si no que en verdad, aunque uno siga sintiéndose inmortal, la vida es efímera, volátil...etérea.

Te digo adiós con estas letras, honro tu memoria con esta carta a tu ausencia; deseando que aquellas pláticas y planes que alguna vez compartimos hayan sido logrados luego de mi partida. Por mi parte, soy feliz, inmensamente feliz y cada día sonrío al despertar y ver que estoy aquí, con el amor de mi corazón y el tesoro de mi vida.

Edgar, Dios te bendiga donde quiera que estés.